capítulo 1

Capítulo 1

Era ya denoche pero una chica paseaba tranquila por el bosque se llamaba Sara (aunque por alguna razón preferia que la llamaran Shana ), vivia en Leipzig una pequeña ciudad de Alemania.
Salir a pasear la relajaba y la aislaba del mundo, todo iba bien hasta que sintio que algo iba mal en su casa.
Empezó a correr por el bosque sin saber mui bien a donde iba pues esta vez se habia alejado mas de lo normal.
Pero ella era ágil y muy rapida, depronto vio el camino que dirijia a la salida, cuando llego a su casa la encontro toda en orden menos porque toda estaba en un completo silencio.
Subió por las escaleras, revisó todas las habitaciones y ni rastro de sus padres, no estaban por ningún sitio y no habia marcas de secuestro o robo simplemente habian desaparecido.

Empezó a correr hacia su habitación para coger el teléfono y llamar a la policia pero cuando estaba apunto de entrar sintió un aliento gélido en su nuca,y que la temperatura empezaba a descender. Se dio la vuelta y vio a un chico un poco mallor que ella, que bestia de negro: era alto, delgado, y fibroso, de facciones suaves, cabello negro que caia a ambos lados de la cara aunque con flequillo, y lo mas interesante debajo de ese cachito de pelo se encontraban los ojos mas bonitos y alucinantes que habia visto nunca, eran unos ojos azules de mirada petrificante.
Habia algo en el que la atraia pero a la vez lo hacía odioso.
El la miró y le dijo: Te estaba esperando. Su voz era seca y fría pero a la vez atractiva y dulce.

No podía moverse estaba paralízada pero de la nada aparecio un joven de 26 años aproximadamente acompañado de otro mas pequeño, un chico de unos 15 o 14 años.
El mayor tenia expresión severa pero algo dulce el pelo marrón y corto, y los ojos oscuros, el pequeño el pelo rubio de la misma forma que el de pelo negro (bueno un poco mas corto) y los ojos verdes que sin duda eran exactamente igual de bonitos y atrayentes que los ojos azules del de negro.
Este chico tenia algo que tambien la atraia pero no tenia esa parte odiosa.
Los dos chicos eran fibrosos, igual que el de negro, el mayor desenvainó su espada y lo retó.
Sin pensarselo dos veces sacó su espada y se pusieron a luchar, mientras el rubio se acerco a ella y le dijo que se quedara allí sin moverse, entonces sacó su espada para ayudar a su compañero, por que su adversario era joven pero mui fuerte, rapido y ágil.

El mayor se retiró de la batalla y coguió a la chica de la mano, se acercaron al rubio que dejo de atacar y con un simple movimiento de muñeca se esfumaron.

Sara sintió como su cuerpo iba perdiendo fuerzas y el chico de pelo rubio la recogia delicadamente, momentos antes de desmallarse y caer .